Theophrastus Phillippus von Hohenheim conocido como Paracelso, nacido en 1483 en Einsiedeln, Suiza, fue el medico más importante del ultimo milenio, y podemos decir que se anticipó en 500 años a la medicina de su tiempo.

Además de médico podemos decir que era alquimista, químico, astrónomo y astrologo. Padre de la toxicología, la homeopatía, la higiene y los principios básicos de la ética y la ciencia médica.

Conocía a fondo los misterios del arte de curar de antiguas civilizaciones como ser Egipto, Persia, China, Grecia, en un tiempo en que la ciencia médica había retrocedido a niveles de ignorancia ilustrada. Dejó una obra muy importante, la mayoría aun sin traducir, de gran amplitud y profundidad. Las que han sido traducidas, suelen ser textos obscuros e incompletos.

Fue incomprendido, envidiado y perseguido. Posiblemente envenenado cuando contaba con 47 años. Se dice que, consiente del envenenamiento intento curarse, pero no lo logro.

Lego sus bienes a los pobres por los que siempre tuvo predilección. Y aunque era requerido por los nobles y las cortes, prefería cuidar y curar a los más necesitados por ello se lo conocía como el “medico de los pobres”.

Fue un alma grande dedicada al servicio de la humanidad, marcando los lineamientos que debería seguir una medicina humana guiada por la mística, el arte y la ciencia.

El Ser Humano según Paracelso

Paracelso, como otros alquimistas, consideraba que el mundo estaba constituido al menos por tres naturalezas bien definidas a las que llamaba en términos alquímicos: Sal, Azufre y Mercurio. En correspondencia, el ser humano respondía también a esta triple naturaleza, o como diríamos en términos contemporáneos, cuerpo, alma o psiquis y espíritu.

También es apropiado decir: sal – materia; azufre – energía; mercurio – inteligencia.

Es muy importante este punto ya que para que podamos reconocer a un sistema de medicina como válido, debe antes que nada conocer al hombre en forma integral.

La medicina de carril actual, reconoce, estudia y trata al cuerpo físico material, campo en el que se han hecho avances excelentes, y se extiende tímidamente al campo de la psicología, pero también con un sentido y una concepción materialista.

En realidad, para la medicina tradicional y para Paracelso, el Hombre es un espíritu que se rodea de un alma o psiquis (mundo de las emociones y pensamientos), los que encarnan en un cuerpo material de naturaleza electro-termo- magnética.

Así, el cuerpo es la cristalización en la materia de un alma y un espíritu, y para conocer las causas de la enfermedad debemos conocer AL HOMBRE es decir su cuerpo, su alma y su espíritu.

Salud – Enfermedad

La salud es un estado de armonía y equilibrio psico- físico- espiritual que permite al ser desarrollarse completamente y en el que no existen malestares o sufrimientos.

La salud en realidad es una “sensación”. Así decimos “me siento bien, me siento sano” o sea que pertenece a la esfera psíquica más allá del estado del cuerpo físico material.

Cuando por causas externas o internas, se altera este equilibrio nos “sentimos enfermos”.

La palabra enfermedad proviene del latín “infirmita” o falta de firmeza y va acompañada de síntomas que son las alarmas que nos avisan que algo no está bien.

La medicina actual se aboca fundamentalmente a tapar el síntoma (alarma), a veces sin tratar la enfermedad que lo provocó, la que reaparecerá en el futuro bajo una nueva forma. Sin embargo, la enfermedad es un mecanismo inteligente de la naturaleza que busca restaurar la armonía perdida en alguno de los planos del ser.

Causas de la enfermedad según Paracelso

Paracelso dividía el origen de las enfermedades, es decir, sus raíces, en 5 causas fundamentales:

-Ens (ser) Astrale: Las condiciones de nuestro entorno natural o el artificial creado por el hombre. Clima, condiciones electromagnéticas, elementos materiales constitutivos del lugar, condiciones del agua, aire, alimentos etc. etc.

-Ens Veneni: Todas las impurezas y venenos que afectan a nuestras vidas. No solo se refiere a impurezas físicas, sino que aquí se incluyen las impurezas emocionales y mentales.

-Ens Naturae: Las causas heredadas de los padres, referidas tanto a la genética, como a los principios emocionales y mentales. Está en relación con el temperamento de las personas y características de la entidad espiritual encarnante en esa vida.

-Ens Espirituale: Como habíamos indicado en el apartado sobre “el hombre para Paracelso”, la causa profunda, la raíz de toda vida o expresión está en el plano o mundo espiritual. -voluntad, imaginación- memoria. Tanto el exceso como la falta de alguno de estos elementos es causa de enfermedad. Ejemplo, una mala voluntad es origen de variedad de enfermedades, así como la buena voluntad es capaz de curar.

-Ens Dei: La Ley de Justicia Divina que rige el universo, también llamada en oriente Karma.

“Lo que sembramos debemos cosechar”. Muchas enfermedades tienen su origen en causas sembradas en esta u otras vidas (reencarnación).

La extensión de este artículo nos impide profundizar en cada uno de los puntos, pero usando el sentido común vemos que estas 5 causas incluyen el origen tanto de las enfermedades físicas como las alteraciones psicológicas y las enfermedades mentales.

Demuestra un conocimiento integral del hombre como ser físico-psíquico-espiritual, y su relación con el Universo y la Naturaleza, así como los frutos y consecuencias de sus acciones. ~

Equipo de RevistAcrópolis